FromSoftware lleva más de una década en modo “no-fallo”. Básicamente, si fueran un personaje jugable, tendrían 99 en todo y cero puntos débiles. Desde Dark Souls hasta Sekiro y Elden Ring, cada juego es como si Miyazaki dijera: “¿Y si lanzamos otro GOTY nomás porque sí?”
Y justo cuando creíamos que no podían volverse más locos… boom: Elden Ring: Nightreign. Un spin-off multijugador cooperativo que mezcla la fórmula Souls con un toque de Battle Royale, un poco de estrategia en equipo y una pizca de “¿qué demonios fue eso?”. Spoiler: fue una tormenta de langostas que te borró tres niveles y tu dignidad.
Nightreign: ¿Un Soulslike? ¿Un MOBA? ¿Una terapia de pareja?
Nightreign te suelta en una versión “recién salida de rehab” de Limgrave, con dos aliados y un reloj que te grita: ¡Muévete! Olvídate del clásico viaje introspectivo del Deslucido; aquí todo es a gritos, en grupo, y probablemente con un compa que jura que sí sabe esquivar pero se muere en cada esquina.
Formas parte de un escuadrón de tres Nightfeeters, un grupo de guerreros con poderes especiales, builds únicas y nombres que suenan a banda de metal progresivo o luchadores de AAA.
Conoce a los Nightfeeters (a.k.a. el escuadrón anti-cordura)
- El Salvaje: guerrero con armas pesadas, escudo chico y un gancho. Es como si Thor tuviera el DLC de Batman.
- El Guardián: tanque nivel “a mí me pegan, ustedes pegan”. Usa una lanza gigante y puede hacer temblar el suelo con los enemigos. Y sí, es el favorito de los que nunca esquivan.
- El Asaltante: entra, golpea, y deja un tótem que te pega por él. El primo rudo del chamán de cualquier MMO.
- El Ojo Certero: arquero que atraviesa paredes. Es el que siempre se queda atrás, pero cuando te salva, parece magia negra.
- La Duquesa: dagas, parkour y manipulación del tiempo. Si John Wick fuera bailarina y viajara en el tiempo, sería ella.
- El Revenenant: invocador con tres espectros que hacen el trabajo sucio. Básicamente juega en modo Uber: solo coordina y cobra.
- La Reclusa: maga absorbente (no como esponja, sino que toma poder de los ataques enemigos). Ideal si te gusta tirar rayos con estilo.
Misiones cronometradas, círculos de muerte y… más caos
El juego gira en torno a las Incursiones Nightreign: misiones de tres días (in-game, no en la vida real, respira) donde tienes que lootear, mejorar, explorar, y rezar porque el RNG esté de tu lado.
A medida que avanza la misión, el mapa se encoge al estilo battle royale. Si te sales del círculo, el juego te castiga con daño constante. Básicamente: el piso es lava, pero existencial.
Y sí, el RNG tiene alma. Y es malvada. Entre los eventos aleatorios más “divertidos” están:
- Tormentas de langostas que te quitan niveles (o sea, tu alma entera).
- Demonios con parálisis AOE que aparecen sin invitación, como tu ex en una fiesta.
- Cambios climáticos que afectan tu build como si el juego tuviera sentimientos y no le cayeras bien.
Estrategia, sinergia y ese compa que nunca revive a nadie
Coordinar a los Nightfeeters es clave. Si tu compa va de Salvaje y tú de Reclusa, deberían trabajar juntos… pero si no se hablan, terminan como dos piñatas pegándole al aire. Las habilidades combinadas, la distribución de recursos y la comunicación son tu mejor (y a veces única) herramienta para sobrevivir.
¿Lo bueno? Hay metaprogresión: reliquias, talismanes y mejoras entre partidas. ¿Lo malo? No importa qué tan OP estés… si el RNG decide que hoy no, pues no.
¿Nightreign es para ti? Depende: ¿te gusta el caos y morir con tus amigos?
Este juego no es para almas sensibles. Nightreign es para quienes disfrutan tanto la victoria como el colapso total con sus panas. Hay momentos gloriosos donde todo fluye, haces un combo perfecto, y gritas de alegría. Y luego están los momentos donde una tormenta te deja sin equipo, sin vida y sin fe en la humanidad.
Pero si te gusta el caos, el teamwork frenético, y la posibilidad de morir de una forma distinta en cada partida, Nightreign te va a encantar.
Algo que sí debemos advertirte es que: llegas, preparas tu hábitat para jugar (chetos, coca, ventanas cerradas y teléfono en silencio) y mientras piensas en un par de partidas con los compás y a mimir, ya pasaste más de 5 horas de juego, así es, es sumamente adictivo, esperemos FromSoftware no deje morir el juego y le mucho amor por muchos años, no como a Bloodborne que lo mando a vivir con sus tíos y jamás volvieron por el.
Veredicto final: un spin-off brutal, distinto y sorprendentemente divertido
Elden Ring: Nightreign no es solo otro Soulslike. Es una mezcla rara, valiente y emocionante que te hace gritar, reír, y renunciar a tus amigos cuando no esquivan un área de efecto. Con su jugabilidad impredecible, sus personajes únicos y un mundo lleno de peligro (y bugs que probablemente son features), FromSoftware demuestra que aún puede arriesgar y sorprender.
¿Te gusta Elden Ring? ¿Tienes dos amigos confiables (o al menos funcionales)? ¿Te va el caos? Entonces, dale. Pero prepárate para sufrir… con estilo.
🎮 Escrito con cariño, sarcasmo y varias muertes en Limgrave por Predlalo
📰 Publicado por Culture Conection – donde el caos también tiene lore